sábado, 15 de febrero de 2014

Ulyanovsk, 16 de febrero de 2014. La primavera trompetera...

Ulyanovsk, 16 de febrero de 2014. 

Hola seguidores esteparios. Otra vez mil disculpas por no haber podido escribir antes la entrada del blog lo que me lleva a preguntarme si es que ya me he rusificado totalmente y ya nada me extraña o es que soy un vago redomado) no sé por qué pero me inclino por las segunda opción).

Pero vamos al turrón aunque ya no sean fechas. Voy a aprovechar que el espíritu olímpico me embriaga y voy a darle a la tecla a velocidad de medalla de oro. Porque ahora en Rusia todo es espirítu olimpico por los poros. Yo aquí tengo la impresión de que hay dos Juegos Olímpicos paralelos, unos para los rusos, que les bombardean con que todo está genial, todo va perfecto... y otro para los extranjeros, que se dedican a sacar los problemas de Sochi, que si hace calor, que si la nieve parece aguachirri, que si el tubo del 'halfpipe' es como la cañería de mi casa, una mierda,...

Me da un poco de rabia porque parece que se va a sacar solo lo malo pero por otra parte también, el que decidió que la Benidorm rusa tenía que ser la sede de los juegos debe estar, o debería, tirándose de los pelos. Si hasta los de biatlon iban en manga corta... en fin. Que no todo es tan malo pero es verdad que hay cosas que se han hecho a lo ruso, mal y tarde... me recuerda a cierto país donde manda un señor con barba... y no es Santa Claus.

Una pena lo de Javier Fernández, en Rusia le admiran mucho. De hecho es al único que conocen, tampoco yo conozco a tres cuartas partes de la selección española. ¡Que mérito tiene el ponerse a hacer un deporte de invierno en España! Lo digo con conocimiento de causa tras mi fugaz paso por el esquí de fondo. Efectívamente, esa potencial estrella del esquí ha decidido colgar los esquíes. Demasiado riesgo para mi integridad física. Ahora vuelvo a plantearme el ser piscinero. Pero es que da taaaaanta pereza cuando hace tanto frío.

Bueno, frío... estamos en plena primavera trompetera que decía la canción. Ayer a sólo 1 bajo cero y hace dos días positivos por primera vez en un mes. Este año ha nevado más y claro, la cantidad de agua que se deshiela es más grande y está todo asqueroso de charcos que parecen el Lago Ness. Me imagino que en unos días tendremos otra vez frío. Tengo ya ganas de un poco de sol y no tener que llevar 50 capas de ropa.

En mi calle hay un hombre que se dedica a limpiar la nieve y echar arena de vez en cuando y justo cuando se había matado a quitar el hielo llega el calor y deshace mucho de lo que quedaba, si se hubiera esperado un par de días se hubiera ahorrado todo el trabajo. Porque quitar el hielo acumulado es cansino. Le dan con una especie de punzón gigante hasta partirlo en trozos pequeños, como si fuera un mortero. Y encima el hombre no es que sea precisamente Swarzenegger o como se escriba, es mas tirando a Enjuto Mojamuto.

Por lo demás, tranquilidad en el frente. Bueno, casi porque al final me he tenido que reunir con la directora para cantarle, muy educadamente eso sí, que no hacen nada por promocionar el español en la ciudad. Tenía un par de grupos de inglés que han acabado y quería aprovechar esos huecos para buscar grupos de español. Pero no han hecho nada y me he hartado un poco. Que sí, que son muy amables, que lo que tú quieras pero tienes que apretar las tuercas si quieres conseguir algo. Para conseguir unos documentos que me pueden hacer falta en el futuro he estado dando la matraca un mes. Vamos ver cómo se desarrollan los acontecimientos...

Porque tal y como está el panorama en España da un poco de miedo. En dos semanas unos cuantos amigos míos periodistas han perdido el trabajo, o sea que no pinta muy bien la cosa. Aunque tampoco Rusia es que sea el maná. Algo mejor están pero no tan bien como pensaban que iban a estar... ¿se ha venido la crisis conmigo?

Mientras tanto, pensando ya en agosto y con los billetes comprados, una buena oferta de Iberia. Ama, vete preparando los txipirones en su tinta. Seguid atentos y si véis que no escribo, buscadme en un charco. Do svidania.